En Cocinas Imco siempre partimos de la idea o necesidad inicial que nos transmitas, para dar forma a la cocina perfecta para ti. Y, este caso, ¡no es una excepción!
La prioridad para nuestro cliente era sacar el máximo provecho al espacio disponible, transmitiendo amplitud, sin de lado la luminosidad ni renunciar a un toque cálido y acogedor. Y, después de sopesar variar opciones, optamos por una distribución en “L” para que la zona de trabajo fuera lo más cómoda, amplia y funcional posible, manteniendo el fregadero y la placa enfrentados en ángulo, con una gran superficie entre ambos.
Además desplazamos los elementos altos, como el frigorífico, el horno o el microondas, a otra zona de la cocina para liberar la encimera principal. Así logramos una mayor ligereza visual y el máximo espacio de trabajo posible.
Materiales naturales y una iluminación adecuada, siempre imprescindibles
Puesto que conseguir un ambiente acogedor fue primordial en este proyecto, nos decidimos por el uso de tonalidades cálidas como el cachemir, combinándolo con la piedra natural en la encimera, también en tonalidades cálidas y la madera de la mesa auxiliar, para lograr esa sensación de hogar única que solo los materiales naturales son capaces de crear.
Y es que su textura, colores y carácter atemporal, conectan a la perfección con lo que, para nosotros, es una cocina: un espacio para trabajar y elaborar tus mejores recetas cómodamente, pero también en el que disfrutar, socializar, celebrar y compartir momentos espaciales durante muchos años.
Por otro lado, la iluminación tuvo un papel fundamental, tanto a la hora de a reforzar la sensación de claridad, como de realza la belleza de los materiales, facilitando el trabajo y contribuyendo, a su vez, a dar ese toque cálido al conjunto.
No nos olvidamos del almacenamiento… ni de los detalles
Como en todos nuestros proyectos (salvo que las indicaciones sean otras), no escatimamos a la hora de incluir esos espacios de almacenamiento que juegan un papel tan importante durante el día a día. En este caso, puedes ver los cajones de gran tamaño y armarios distribuidos por toda la cocina, con capacidad suficiente para tenerlo todo ordenado y no echar nada en falta.
Y, además, aprovechamos un pequeño hueco libre en la estancia para añadir una zona extra con una vitrina y modulo decorativos, perfectos para aligerar visualmente el espacio y aportar un punto coqueto.
